Slippy es una babosa que se encuentra con un gran problema. Trabaja como repartidor de paquetes en la mayor empresa intergaláctica de mercancías del universo y ha perdido la carga tras sufrir un accidente con su nave espacial. Pero no hay de que preocuparse, o eso espera, ya que cuenta con la compañía de su fiel compañero Mr McFly y sus armas, la cuales serán imprescindibles para sortear todos los obstáculos y enemigos para recuperar cada paquete a tiempo en diferentes mundos.
Kickback Slug: Cosmic Courier es un juego sustentado en las físicas. El movimiento de Slippy se basa en el retroceso proporcionado por los disparos que realizamos con sus armas, lo que nos permitirá desplazarnos en función de la dirección de éstos. Es decir, si queremos movernos hacia adelante, debemos disparar hacia atrás. Esto provoca, en primera instancia, un desbarajuste mental en tu cabeza, ya que realmente debemos calcular los disparos y aceleraciones con el jetpack para desplazar al personaje por el escenario, teniendo siempre en cuenta la inercia, gravedad y los obstáculos y enemigos de la zona. Cuesta un poco entrar en su control, pero en varios intentos y con paciencia es posible dominar el desplazamiento de Slippy y moverlo por el escenario con cierta soltura.
El universo del título se compone de varios mundos (Jungla, Pico Helado, Minas, etc.), divididos en numerosas fases, las cuales superaremos una vez consigamos llegar a un portal de escape. Recoger los paquetes repartidos por las fases se presenta como tarea opcional, pero con ello desbloquearemos unas "pegatinas" que podemos visualizar en la sección galería. No tienen mucho misterio y tampoco aportan nada. Únicamente se visualizan en su apartado correspondiente y listo. No hubiera estado de más haber implementado otro tipo de armas u otros personajes seleccionables.
Los escenarios son en su mayoría laberintos de mediano tamaño con obstáculos y enemigos, que nos mandarán al otro barrio al mínimo toque y nos obligarán a reiniciar el nivel desde el comienzo. Al finalizar la última fase del mundo nos enfrentaremos a un poderoso jefe final, variado en sus mecánicas y que suponen en su mayoría un buen reto. Quizás sea lo más destacable de un juego que claramente en este sentido necesita más trabajo. De las 50 fases disponibles, prácticamente más de la mitad son un paseo y no presentan reto alguno. En unas pocas horas puede ser fácilmente completado y salvo por las fases bonus (que se desbloquean al finalizar el juego), el juego no ofrece ningún aliciente para volver a él.
Técnicamente nos encontramos con un juego sólido y sin errores destacables. Y lo es, principalmente, porque gráficamente tampoco tiene mucho que ofrecer. Su estilo cartoon y su alma indie ayudan a querer empatizar con él, pero sentimentalismos aparte, nos encontramos con un arte poco atractivo. Mientras que los personajes principales y algunos escenarios parecen estar más trabajados, los obstáculos y enemigos pueden competir de tú a tú con cualquier jueguecito flash de tu web de minijuegos de referencia. En cuanto al sonido poco que aportar. Si bien las voces de los personajes son simpaticonas y se encuentran bien interpretadas, la música por contra es prácticamente anecdótica. Es cierto que su estilo funk casa muy bien con la estética del juego, pero un sample de veinte segundos repetido a lo largo de todas las fases de un mundo no es algo a destacar positivamente.
En conclusión, Kickback Slug: Cosmic Courier es un juego simpático y curioso, un buen candidato para desengrasar de títulos más complejos. Quizás se echa en falta más contenido y un mejor diseño de niveles, pero en nuestra opinión, tiene lo suficiente para pasar el corte. Si lo encuentras barato dale una oportunidad.
Lo mejor
Su estética cartoon y sentido del humor. Los jefes finales de cada mundo presentan un buen reto. {alertSuccess}
Lo peor
Niveles en su mayoría poco trabajados. Su control puede desesperar de primeras. {alertError}
*Este análisis se ha realizado gracias a un código de descarga para Nintendo Switch que nos ha proporcionado aPriori Digital.
Un poco cansado de juegos con físicas realistas
ResponderEliminar