La celebración del 40º aniversario de Mario trae de vuelta dos de las joyas más queridas de la era Wii. Super Mario Galaxy y Super Mario Galaxy 2 regresan en un paquete que intenta revivir la magia de 2007 y 2010, pero con una puesta al día que deja algunas sensaciones encontradas.
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Revisitar ambos Galaxy es reencontrarse con el mejor diseño de Nintendo. Las mecánicas gravitatorias, los planetas esféricos y el salto entre microuniversos siguen ofreciendo un espectáculo jugable que pocos títulos igualan. En Galaxy 2, la inclusión de Yoshi y los nuevos power-ups como Mario Nube o Mario Roca aportan frescura y variedad a un conjunto ya de por sí brillante.
Pese a los años, ambos juegos conservan una vitalidad asombrosa. La curva de dificultad está tan bien medida como siempre, los mundos destilan creatividad, y la banda sonora orquestada continúa siendo una de las más memorables del catálogo de Mario.
El trabajo técnico es correcto, pero no sorprendente. En Nintendo Switch 2 los juegos alcanzan 1080p en modo portátil y 4K reescalado en TV, lo que suaviza los bordes y limpia la imagen respecto a Wii y a la versión de Super Mario 3D All-Stars. Sin embargo, los modelados del pasado se sienten rígidos bajo texturas en alta definición, generando un contraste algo extraño.
Algunos escenarios lucen vacíos y el detalle de ciertos personajes secundarios —como los Toads— evidencia que no se ha realizado una remodelación profunda. Tampoco se han tocado las cinemáticas pre-renderizadas, que se mantienen en baja resolución. Es un lavado de cara eficaz, pero lejos del mimo visto en Metroid Prime Remastered.
Uno de los mayores aciertos del remaster es la adaptación de los controles. El uso de los Joy-Con y el giroscopio imita con precisión la experiencia del Wiimote y Nunchuck, mientras que en modo portátil se permite apuntar o lanzar fragmentos de estrella mediante el sensor de movimiento o la pantalla táctil.
El nuevo modo asistencia añade opciones para regenerar vida, evitar caídas y hacer más amable la experiencia para jugadores novatos. También vuelve el modo cooperativo, con un segundo jugador usando el puntero para recoger estrellas o ayudar en combate. Es un detalle menor, pero bienvenido.
El contenido adicional es limitado. Se incluyen un capítulo nuevo en el libro de Estela en Galaxy 1 y un cuento inédito en Galaxy 2, junto a una galería musical con temas clásicos y algunos nuevos. Los amiibo de Mario y Estela ofrecen ventajas ligeras, como vidas extra. Son añadidos curiosos, aunque lejos de justificar un precio tan alto.
Super Mario Galaxy 1+2 Remaster demuestra por qué estos juegos son considerados obras maestras del 3D plataformero, pero también por qué Nintendo debería haber apostado por una revisión más ambiciosa. Las mejoras gráficas y de control son notables, aunque insuficientes para un producto con espíritu de celebración.
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Lo mejor:
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Jugabilidad atemporal, fluida y creativa
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Gran adaptación de los controles
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Banda sonora orquestada, ahora más limpia y envolvente
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Lo peor:
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Mejoras visuales discretas para un aniversario tan importante
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Falta de contenido nuevo real más allá de pequeños añadidos
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Precio elevado para un remaster conservador
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| 84 /100 | |




